A los niños les gusta jugar. Disfrutan con cualquier actividad que implique diversión, color y entretenimiento, Y cuando a la diversión se le añade aprendizaje en conexión con la Palabra de Dios, resulta ideal para los más pequeños.
Se divertirán con actividades como pintar, descifrar mensajes ocultos, dibujar, encontrar diferencias entre imágenes. Además, aprenderá algo nuevo con cada una de las historias.
Edad de 9 a 12 años